Súmate a soñar

Para mí es una enorme alegría y un privilegio estar a cargo de Enseña por Colombia. En nombre de cada una de las personas que hacemos parte de este movimiento quiero darles las gracias por habernos acompañado en nuestra Cena Anual de Recaudación y por sumarse a este sueño de nuestros 99 Ecos que cada mañana están desde muy temprano con sus estudiantes en 41 colegios alrededor del país; de los 121 jóvenes que han acabado el programa y los 101 que siguen dedicados 100% a la educación; de nuestro maravilloso equipo que trabaja incansablemente; de la Junta Directiva que ha estado con nosotros hombro a hombro y de nuestros fundadores que desde diferentes latitudes nos siguen dando su apoyo diario.

Estoy segura de que cada uno de ustedes tiene una historia que cuenta cómo la educación jugó un papel fundamental en la historia de sus familias, de sus organizaciones y en la suya propia. Por eso están vinculados a Enseña, creyendo y trabajando desde diferentes lugares para apoyarnos y para sumarse a llevar educación de calidad y más profesores inspirados, con ganas de aprender y trabajar a las aulas de miles de niños que cada año esperan a los nuevos Ecos en sus regiones.

Estoy segura de que cada uno de ustedes tiene una historia que cuenta cómo la educación jugó un papel fundamental en la historia de sus familias, de sus organizaciones y en la suya propia.

Hoy vivimos en un mundo de profundas disrupciones. La economía y la política global están enfrentando grandes fuerzas que están cambiando la manera como nos relacionamos, como vivimos y como producimos. Y nuestra querida Colombia, además de estar inmersa en esta nueva realidad, enfrenta sus propios desafíos. Independientemente de que nos llene de esperanza el futuro del país o nos llene de temor, estoy segura de que todos los asistentes a nuestra cena y aquellos que día a día nos demuestran su incondicional apoyo, compartimos la certeza de que, hoy más que nunca, el mundo y el país nos pide dos cosas fundamentales:

La primera es una nueva generación que lidere el cambio, que no solamente conozca los problemas del país, sino ante todo, que los comprenda de primera mano, en su profundidad y su complejidad. Necesitamos una generación crítica que no trague entero pero que a la vez, tenga un corazón lleno de esperanza, que esté dispuesto a trabajar por liderar procesos que nos permitan enfrentar los grandes retos que tenemos.  Y lo segundo es una educación de calidad que forme ciudadanos críticos, activos, responsables, que promuevan el reencuentro, el diálogo, la convivencia y que tengan las habilidades que el siglo XXI trae consigo.

Teniendo esto en cuenta, nuestra Cena Anual de Recaudación fue un rotundo éxito, no solo porque fue un momento de reconexión con nuestra misión y visión, sino porque cumplimos nuestros tres grandes objetivos:

1. Cada uno de los asistentes, donantes, aliados, amigos de la casa y comunidad Enseña por Colombia, ratificaron la importancia de seguir trabajando unidos hacia el mejoramiento de la calidad de la educación en Colombia y el papel fundamental que tiene cada uno en este proceso.
2. Dar a conocer el impacto que Enseña por Colombia ha tenido, a través de testimonios de dos de sus Ecos: Diego Martínez y Cristina Valdivieso, que enseñan en Bogotá y Urabá respectivamente, y el testimonio de Daniel Agudelo, egresado del programa, quien hoy trabaja en el Ministerio de Educación Nacional. Durante su intervención habló del emprendimiento «Veo Luego Aprendo» que creó junto con otros Alumni, proyecto que sigue impactando en la región de Urabá, donde fue profesor.
3. Alcanzar la meta de recaudación de fondos destinados a la formación en pedagogía y liderazgo, de la nueva generación de líderes que enseñarán en varios colegios a nivel nacional el próximo año.

Nuestro sueño es tener un movimiento de 1.000 jóvenes profesionales que estén dedicados a trabajar por la educación del país y por generar oportunidades para nuestros estudiantes. Soñamos con tener profesionales altamente cualificados, tomando grandes decisiones para transformar el sistema, pero también jóvenes que lideren desde sus regiones y desde sus instituciones educativas.

Por aquello, queremos agradecerles a todos nuestros aliados y participantes por sumarse a trabajar conjuntamente para generar los cambios estructurales que el país necesita, por dedicar y unir esfuerzos, ideas, estrategias y pensamientos que nos lleven a lograr de manera colectiva que todos los niños, niñas y jóvenes de Colombia puedan acceder a una educación de calidad.